Cómo inicarse en el trading
La estrategia planteada en este artículo no requiere grandes cantidades de dinero, para que así todo el mundo pueda seguirla y hacerse con la idea del trading sin arriesgar demasiado.
Soy de la opinión de que cuando haces trading deberías tratar tu banca igual que cuando asumes riesgos. Debes estar preparado a perder todo lo que apuestes. Mientras aprendes, deberías utilizar un porcentaje de tu banca para cada operación. Aunque cuando tengas más experiencia puede que ésta no sea la mejor forma de controlar tu dinero, cuando empiezas ésta prevención te asegurará un mantenimiento de la banca.
Tomemos una banca inicial de 100 puntos. Lo primero que hay que considerar para decidir cuánto apostar es el riesgo implicado en la transacción. Si crees que no hay riesgo alguno entonces apostarás el 100% de la banca. Cuanto más difícil te parezca la transacción menos deberás arriesgar. Esto puede parecer muy sencillo y evidente, pero he visto tanta gente jugándoselo todo sin plantearse siquiera que existía un riesgo para su capital, que creo que merece la pena recordarlo.
Aunque la estrategia que propongo es de bajo riesgo, todavía recomiendo comenzar con un máximo del 5% de la banca disponible. Esto puede parecer muy poco, pero aquí es donde entra la picaresca del trader. El 5% de tu banca es la cantidad en exposición una vez que ambos lados del trading estén completos, no el riesgo tomado para hacer la apuesta en contra. Por eso es crítico comenzar la carrera de cero, sin posiciones abiertas ni apuestas pendientes.
Una vez que hayamos decidido lo que estamos preparados a arriesgar tenemos que seleccionar el mejor lugar para jugárnoslo. La estrategia que recomiendo es el “lay” (apuesta en contra) al cuarto favorito para “backearlo” (apostar a favor) después con cuotas más altas. Dicho esto, hay que recordar que los principios que vamos a practicar con este primer trading son fundamentales y que para aquellos que se sientan cómodos con ellos, están garantizados los beneficios. Cuando comiences puedes utilizar los apoyos y herramientas que consideres necesarios (calculadora, hoja de cálculo...) pero una vez que te acostumbres, procura dejarlos atrás.
Ejemplos prácticos de trading: cuándo cortar pérdidas y cuándo cerrar ganancias.
Vamos a utilizar para el ejemplo una apuesta en la que el único criterio a tener en cuenta será que el caballo sea el cuarto favorito. De esta forma lograremos el balance entre una buena liquidez y un riesgo bajo de victoria del caballo. El mismo principio se aplica a cualquier caballo y puede ejecutarse comenzando por la apuesta a favor para pasar a apostar en contra. El objetivo es arriesgar lo menos posible mientras adquirimos experiencia. Aunque estoy seguro de que todos preferiríamos hacer dinero desde el primer día, el objetivo de momento es acostumbrarse al funcionamiento de los mercados. Incluso si la lías y todo te sale al revés deberías poder escapar con tu banca casi intacta. Tu propia capacidad económica dictará las cantidades a arriesgar, pero no te recomiendo que arriesgues más del 5% de tu banca, por si acaso el cuarto ganase la carrera.
Nuestra banca serán 1000€ de forma que lo máximo que estamos dispuestos a perder son 50€.
El caballo que hemos seleccionado está a cuotas 8.8 – 9.00 el incremento a esta cuota (tic) es 0.2, así que por cada 50€ apostados, un tic nos cuesta 10€. Debido a la diferencia entre las apuestas a favor y en contra, en el momento de hacer la apuesta ya habremos perdido 10€. Si el mercado se mueve contra nosotros, el precio de salida será 8. Cinco tics en nuestra contra a 10€ cada uno. Recuerda que si en este momento apostamos apostamos lo mismo a favor que habíamos apostado en contra, sólo perdemos dinero si el caballo gana.
Por supuesto podemos salirnos antes. Por ejemplo, si sólo aceptas una pérdida de 20€, te puedes salir cuando el precio alcanza 8.6. En ocasiones el mercado se mueve muy rápido y antes de que te des cuenta el precio se ha desplomado hasta 7.8 – 8. Esto supondría una pérdida de 60€ si habíamos apostado 50€. Como es más de lo que habíamos previsto perder como máximo, recurrimos al plan B, y apostamos un poco más a favor de lo que habíamos apostado en contra para reducir las pérdidas potenciales. En éste caso serían 1.47€. De esta forma cerraríamos con una pérdida segura independientemente del resultado de la carrera. Recuerda que en éste momento del aprendizaje estamos intentando mantener la banca, no tener historias que contar a los nietos. Incluso si crees que el mercado oscilará de nuevo hacia una posición ventajosa, o el caballo no ganará, debes hacer el trading una vez que llegues a tu pérdida máxima tolerada.
Qué hacer si hemos apostado en contra de una selección y el mercado no se mueve o se mueve en la dirección deseada.
El mercado está a cuotas 8.8- 9 y hemos apostado 50€ en contra del cuarto favorito a 9. Si el mercado no se mueve podemos cerrar el trading a 8.8 por la misma cantidad que habíamos apostado originalmente. Esto supondría unas pérdidas de 10€ si el caballo gana. Si el mercado se mueve a nuestro favor, debemos considerar en qué momento nos interesa salir. Sabemos que si el mercado se mueve un tic, podríamos apostar 10€ para conseguir una apuesta gratuita. Pero, el primer tic sólo salva la diferencia de cuotas entre las apuestas a favor y en contra, por lo que a 9-9.2 lo único que haríamos sería anular nuestra apuesta original al apostar a favor 50€ al mismo precio que los habíamos apostado en contra. Con un sólo movimiento más tendríamos un trade con ganancias. Entonces tenemos la opción de llevarnos el beneficio, invertirlo en la carrera, o una combinación de ambas. El razonamiento detrás de ésta decisión puede ser muy variado. Veamos la mecánica:
Asumiendo que las cuotas se mueven hasta 9.4 – 9.6.
Podríamos apostar a favor 50€ a 9.4. Esto nos daría una apuesta gratuita de 20€ si el caballo gana. Si pierde la carrera, ni perdemos ni ganamos.
Si queremos garantizar un beneficio, debemos apostar a favor menos de lo que habíamos apostado en contra pero siempre cubriendo el riesgo que asumimos con el lay: 400€. En este caso podemos apostar 48€ que nos garantizarían un beneficio mínimo de 2€.
En este momento es todo lo que hace falta para realizar un trading. La clave es preservar la banca en la medida de lo posible para poder seguir practicando. Es como jugar a las cartas, la primera vez que juegas te puede salir bien, pero a la larga la práctica es fundamental para ganar partidas. La diferencia es que jugando a las cartas no es tan fácil cubrirse.
Los 4 pilares del trading profesional: aplícalos a las apuestas.
SEGUIR LA TENDENCIA.
Asumiendo que las cuotas se mueven hasta 9.4 – 9.6.
Podríamos apostar a favor 50€ a 9.4. Esto nos daría una apuesta gratuita de 20€ si el caballo gana. Si pierde la carrera, ni perdemos ni ganamos.
Si queremos garantizar un beneficio, debemos apostar a favor menos de lo que habíamos apostado en contra pero siempre cubriendo el riesgo que asumimos con el lay: 400€. En este caso podemos apostar 48€ que nos garantizarían un beneficio mínimo de 2€.
En este momento es todo lo que hace falta para realizar un trading. La clave es preservar la banca en la medida de lo posible para poder seguir practicando. Es como jugar a las cartas, la primera vez que juegas te puede salir bien, pero a la larga la práctica es fundamental para ganar partidas. La diferencia es que jugando a las cartas no es tan fácil cubrirse.
Los 4 pilares del trading profesional: aplícalos a las apuestas.
SEGUIR LA TENDENCIA.
La tendencia es la dirección del mercado. Hacia dónde se moverá. Mientras que en la Bolsa la tendencia puede durar meses, en los mercados de Betfair depderá del tipo de evento. Sólo necesito saber cuando empieza y cuando acaba la tendencia para hacer beneficios extraordinarios y la mayoría de los sistemas de trading lo que intentan es definir la tendencia y explotarla. En mercados de larga duración, como por ejemplo ganadores de un campeonato (La liga, ACB, NBA, Calcio, ASOBAL, Champions...), una tendencia puede durar meses, en la temporada 2005/2006 las cuotas del Chelsea en la Premier han seguido una tendencia a la baja de meses, al igual que las de la Juventus en el Calcio, o el Barcelona en la liga. Cualquiera que hubiese apostado a favor del Barcelona, la Juventus, o el Chelsea a principios de temporada, estaría antes una oportunidad de negocio carente de riesgos. Apostar en contra del Barcelona antes de su derrota contra el Valencia, al ver el cambio de tendencia tras la copa, habría reportado muchos beneficios.
Desde un punto de vista teórico, parece muy sencillo, sólo tengo que saber cuando empieza la tendencia y la duración de la misma. En la práctica sin embargo, no existe ningún método fiable para anticiparnos a la tendencia, ni para saber cuanto va a durar. Pero para construir un sistema ganador, no nos hace falta adivinar acontecimientos futuros, ya que los buenos planes de trading sólo deben definir unas reglas de entrada cuando la tendencia ya está en marcha y salida cuando la tendencia se modifica.
También existen los sistemas contra-tendencia, que aplicados a apuestas serían tomar la posición contraria a la natural según el desarrollo del evento, esperando que la tendencia se rompa. Si alguien hubiese pensado que el Barcelona iba a pinchar cuando llevaba 15 o 16 partidos sin perder, podría haber apostado en contra del Barcelona a cuotas muy bajas, para apostar ahora que la tendencia ha cambiado y las cuotas han vuelto a subir a favor de la victoria en liga del equipo.
CORTAR LAS PÉRDIDAS.
Al realizar la primera apuesta en Betfair estamos de hecho abriendo una posición en un mercado, y pueden ocurrir sólo dos cosas: Entramos en pérdidas (si hemos apostado a favor y la cuota sube, o si hemos apostado en contra y la cuota baja) o en beneficios (si apostamos a favor y la cuota baja, o apostamos en contra y la cuota sube). Si entramos en pérdidas, desde el punto de vista del trader, lo único que podemos hacer para asegurarnos que podremos apostar mañana es cortar las pérdidas de forma drástica. Psicológicamente es muy difícil, si no somos disciplinados cortar las pérdidas es lo más difícil de hacer en la práctica, mucho más que parar la ganancia ya que siempre tenderemos a intentar recuperar nuestro dinero, en estos momento siempre hay que recordar algo muy obvio pero muy fácil de olvidar: Puedes hacer lo mismo con el dinero que no pierdes que con el dinero que ganas.
Por eso lo principal a la hora de formular un plan de trading es definir las condiciones de salida y seguirlas a rajatabla independientemente de lo seguros que estemos de las futuras ganancias.
DEJAR CORRER LOS BENEFICIOS.
Para que el trading sea rentable es necesario que las apuestas ganadoras sean mayores que las perdedoras. Por ello, a la estricta aplicación de las condiciones de salida, hay que incorporar facilidades para que nuestras ganancias continúen aumentando hasta el límite de la tendencia. Puede ser mediante un objetivo de benficios que nos asegura un ratio de rentabilidad-riesgo favorable (si nuestro porcentaje de salida está en el 2%, y nuestro objetivo de benficios en el 8%, la relación será de 4 a 1). Dejar correr los beneficios es crucial para los sistemas seguidores de tendencia en la Bolsa, ya que la baja fiabilidad, obliga a que el importe de las operaciones ganadoras sea superior al importe de las perdedoras para garantizar la esperanza positiva del sistema.
Es complicado en ocasiones dejar correr los beneficios por que tememos perder lo que ya damos por ganado. Una vez más lo que debemos hacer es tratar de seguir el plan. Si lo hemos diseñado bien, funcionará. En tenis por ejemplo, sabemos que un jugador es el gran favorito (hace años Sampras, ahora Federer), en el tenis los grandes favoritos cuando juegan en su superficie predilecta rara vez fallan. Por lo que comprar una posición de Roger Federer mucho antes de un torneo, y dejarlo correr hasta cuartos o semifinales antes de vender la posición, será más ventajoso que cerrarlo justo cuando gana su primer partido. O si comienza perdiendo un set pero le toca servir en el segundo juego, es muy posible que apostando a su favor cuando va perdiendo y su cuota sube, podamos mantener la posición hasta el final del set.
GESTIÓN DEL RIESGO.
Desde un punto de vista teórico, parece muy sencillo, sólo tengo que saber cuando empieza la tendencia y la duración de la misma. En la práctica sin embargo, no existe ningún método fiable para anticiparnos a la tendencia, ni para saber cuanto va a durar. Pero para construir un sistema ganador, no nos hace falta adivinar acontecimientos futuros, ya que los buenos planes de trading sólo deben definir unas reglas de entrada cuando la tendencia ya está en marcha y salida cuando la tendencia se modifica.
También existen los sistemas contra-tendencia, que aplicados a apuestas serían tomar la posición contraria a la natural según el desarrollo del evento, esperando que la tendencia se rompa. Si alguien hubiese pensado que el Barcelona iba a pinchar cuando llevaba 15 o 16 partidos sin perder, podría haber apostado en contra del Barcelona a cuotas muy bajas, para apostar ahora que la tendencia ha cambiado y las cuotas han vuelto a subir a favor de la victoria en liga del equipo.
CORTAR LAS PÉRDIDAS.
Al realizar la primera apuesta en Betfair estamos de hecho abriendo una posición en un mercado, y pueden ocurrir sólo dos cosas: Entramos en pérdidas (si hemos apostado a favor y la cuota sube, o si hemos apostado en contra y la cuota baja) o en beneficios (si apostamos a favor y la cuota baja, o apostamos en contra y la cuota sube). Si entramos en pérdidas, desde el punto de vista del trader, lo único que podemos hacer para asegurarnos que podremos apostar mañana es cortar las pérdidas de forma drástica. Psicológicamente es muy difícil, si no somos disciplinados cortar las pérdidas es lo más difícil de hacer en la práctica, mucho más que parar la ganancia ya que siempre tenderemos a intentar recuperar nuestro dinero, en estos momento siempre hay que recordar algo muy obvio pero muy fácil de olvidar: Puedes hacer lo mismo con el dinero que no pierdes que con el dinero que ganas.
Por eso lo principal a la hora de formular un plan de trading es definir las condiciones de salida y seguirlas a rajatabla independientemente de lo seguros que estemos de las futuras ganancias.
DEJAR CORRER LOS BENEFICIOS.
Para que el trading sea rentable es necesario que las apuestas ganadoras sean mayores que las perdedoras. Por ello, a la estricta aplicación de las condiciones de salida, hay que incorporar facilidades para que nuestras ganancias continúen aumentando hasta el límite de la tendencia. Puede ser mediante un objetivo de benficios que nos asegura un ratio de rentabilidad-riesgo favorable (si nuestro porcentaje de salida está en el 2%, y nuestro objetivo de benficios en el 8%, la relación será de 4 a 1). Dejar correr los beneficios es crucial para los sistemas seguidores de tendencia en la Bolsa, ya que la baja fiabilidad, obliga a que el importe de las operaciones ganadoras sea superior al importe de las perdedoras para garantizar la esperanza positiva del sistema.
Es complicado en ocasiones dejar correr los beneficios por que tememos perder lo que ya damos por ganado. Una vez más lo que debemos hacer es tratar de seguir el plan. Si lo hemos diseñado bien, funcionará. En tenis por ejemplo, sabemos que un jugador es el gran favorito (hace años Sampras, ahora Federer), en el tenis los grandes favoritos cuando juegan en su superficie predilecta rara vez fallan. Por lo que comprar una posición de Roger Federer mucho antes de un torneo, y dejarlo correr hasta cuartos o semifinales antes de vender la posición, será más ventajoso que cerrarlo justo cuando gana su primer partido. O si comienza perdiendo un set pero le toca servir en el segundo juego, es muy posible que apostando a su favor cuando va perdiendo y su cuota sube, podamos mantener la posición hasta el final del set.
GESTIÓN DEL RIESGO.
Por gestión del riesgo entendemos manejo y preservación de la banca inicial, no perder nuestra inversión inicial es el primer objetivo, el segundo es incrementarla. Lo único que nos va a garantizar una gestión inteligente de la banca son los porcentajes de salida. Fijar un porcentaje máximo de la apuesta que podemos perder sin arriesgar el equilibrio entre ganancias y pérdidas.Normalmente cuando tenemos menos dinero de banca inical le damos más importancia a buscar un buen momento para entrar en el mercado que a limitar nuestras pérdidas cuando toca salirse del mismo. Fijar pérdidas máximas incluso cuando nuestra banca inicial son 50, 100, o 1000 euros es muy importante para garantizar el beneficio a largo plazo.
Dos estrategias básicas de trading en juego.
En este artículo explicaremos dos estrategias muy básicas de trading con las que puedes comenzar a abrirte paso en el mundo del trading:
La primera se aplica a carreras de caballos. Justo antes de una carrera que se ofrezca en juego, y a poder ser sobre una distancia superior a las dos millas para darte tiempo a que cambien las cuotas, haces una apuesta en contra del tercer, cuarto, o quinto favorito (depederá del número de caballos en la carrera, pero es bueno excluir al favorito y al segundo). Pongamos que las cuotas son 6, y apuestas 10 euros (estás arriesgando 50 euros, que es lo que deberías pagar si el caballo gana). Bueno, durante la carrera, es seguro que el caballo no va a estar en cabeza de principio a fin (de ahí que escojamos carreras de distancia larga), y las cuotas subirán de ese 6. Márcate un objetivo, por ejemplo 8, y apuesta a favor cuando el caballo llegue a esa cuota una cantidad menor de la que habías apostando en contra, en este ejemplo lo ideal es 8 euros. Ya tienes un greenbook. Si tu caballo gana te llevas 6 euros (pierdes 50 de la apuesta en contra y ganas 56 de la apuesta a favor), si tu caballo pierde te llevas 2 (ganas 10 de apuesta en contra y pierdes 8 de la apuesta a favor).
La segunda se aplica al fútbol. En un partido de fútbol con favorito local en el que esperas que haya al menos un gol, y en el que las cuotas del empate estén entre 3.25 y 4, apuestas en contra del empate justo antes del partido pongamos que a 3.75 los mismos 10 euros (tu riesgo son 27.5 euros). Esperas a que comience el partido, y pongamos que se marca el gol en el minuto 50 de la segunda parte. Las cuotas del empate subirán, ya que es menos probable que ocurra una vez marcado el gol. Márcate un objetivo de nuevo. Pongamos 4.5, una vez que las cuotas alcancen el 4.5 apuestas 8 euros a favor del empate, y voilá, otro greenbook. Si gana cualquiera de los dos equipos ganas 2 euros (ya que ganas 10 de tu apuesta contra el empate y pierdes 8 de tu apuesta a favor del empate), y si se produce el empate, ganas 0.5 euros (ganas 28 de la apuesta a favor, y pierdes 27.5 de la apuesta en contra).
Recuerda que estas estrategias son sólo un punto de partida, y que su aplicación tampoco es garantía de obtener ganancias. Sólo la práctica y la aplicación de tus propias observaciones pueden hacer de ti un buen trader.
La primera se aplica a carreras de caballos. Justo antes de una carrera que se ofrezca en juego, y a poder ser sobre una distancia superior a las dos millas para darte tiempo a que cambien las cuotas, haces una apuesta en contra del tercer, cuarto, o quinto favorito (depederá del número de caballos en la carrera, pero es bueno excluir al favorito y al segundo). Pongamos que las cuotas son 6, y apuestas 10 euros (estás arriesgando 50 euros, que es lo que deberías pagar si el caballo gana). Bueno, durante la carrera, es seguro que el caballo no va a estar en cabeza de principio a fin (de ahí que escojamos carreras de distancia larga), y las cuotas subirán de ese 6. Márcate un objetivo, por ejemplo 8, y apuesta a favor cuando el caballo llegue a esa cuota una cantidad menor de la que habías apostando en contra, en este ejemplo lo ideal es 8 euros. Ya tienes un greenbook. Si tu caballo gana te llevas 6 euros (pierdes 50 de la apuesta en contra y ganas 56 de la apuesta a favor), si tu caballo pierde te llevas 2 (ganas 10 de apuesta en contra y pierdes 8 de la apuesta a favor).
La segunda se aplica al fútbol. En un partido de fútbol con favorito local en el que esperas que haya al menos un gol, y en el que las cuotas del empate estén entre 3.25 y 4, apuestas en contra del empate justo antes del partido pongamos que a 3.75 los mismos 10 euros (tu riesgo son 27.5 euros). Esperas a que comience el partido, y pongamos que se marca el gol en el minuto 50 de la segunda parte. Las cuotas del empate subirán, ya que es menos probable que ocurra una vez marcado el gol. Márcate un objetivo de nuevo. Pongamos 4.5, una vez que las cuotas alcancen el 4.5 apuestas 8 euros a favor del empate, y voilá, otro greenbook. Si gana cualquiera de los dos equipos ganas 2 euros (ya que ganas 10 de tu apuesta contra el empate y pierdes 8 de tu apuesta a favor del empate), y si se produce el empate, ganas 0.5 euros (ganas 28 de la apuesta a favor, y pierdes 27.5 de la apuesta en contra).
Recuerda que estas estrategias son sólo un punto de partida, y que su aplicación tampoco es garantía de obtener ganancias. Sólo la práctica y la aplicación de tus propias observaciones pueden hacer de ti un buen trader.
Apostar en contra de los favoritos.
Cuando las cuotas para el favorito son muy bajas (es un favorito claro), apostar en contra de los dos favoritos. El primero gana un 60% de las veces, el segundo un 20%, y el resto del campo (los corredores) otro 20% en este tipo de carreras con claro favorito. Supongamos que las cuotas son 1.5 y 2.5 para el primero y segundo respectivamente, y apostamos en su contra 50 euros.
50€ x 1.5=25€ de riesgo para ganar 50€ si el caballo no queda primero.
50€ x 2.5=75€ de riesgo para ganar 50€ si el caballo no queda primero.
Si gana el favorito (60% de ocasiones) obtienes 50€ de la apuesta en contra del segundo, menos 25€ de riesgo de la apuesta en contra del favorito.
Si gana el segundo favorito (20% de ocasiones) ganas 50€ con la apuesta en contra del favorito, y pierdes 75€ de la apuesta en contra del segundo, para una pérdida total de 25€.
Si gana cualquier otro caballo (20% de ocasiones), ganas 50€ de cada apuesta para una ganancia total de 100€.
Eso queire decir que a la larga tienes un beneficio fijo. Se pueden presentar dos problemas: en primer lugar no todos los días hay grandes favoritos, ni los segundos favoritos tienen cuotas muy bajas. En segundo lugar, para garantizar que puedes seguir apostando incluso si te llega una mala racha en la que varios segundos ganen sus carreras, necesitas vigilar tu banca. Si sólo dispones de 100 euros, evidentemente no es una buena idea meter 50 a cada caballo, y quizás tengas que limitarte a 10€ euros de apuesta máxima. Recuerda que Betfair no es una casa de apuestas, sino un mercado de valores en el que invertir buscando beneficio a corto o largo plazo. Si tu banco te dijese que en un sólo día te pagarían el 10% de lo que metieses en tu cuenta la abrirías corriendo. Plantéatelo como una inversión, no un juego, y cada mes te harás con un sobresueldo.
Cuando las cuotas para el favorito son muy bajas (es un favorito claro), apostar en contra de los dos favoritos. El primero gana un 60% de las veces, el segundo un 20%, y el resto del campo (los corredores) otro 20% en este tipo de carreras con claro favorito. Supongamos que las cuotas son 1.5 y 2.5 para el primero y segundo respectivamente, y apostamos en su contra 50 euros.
50€ x 1.5=25€ de riesgo para ganar 50€ si el caballo no queda primero.
50€ x 2.5=75€ de riesgo para ganar 50€ si el caballo no queda primero.
Si gana el favorito (60% de ocasiones) obtienes 50€ de la apuesta en contra del segundo, menos 25€ de riesgo de la apuesta en contra del favorito.
Si gana el segundo favorito (20% de ocasiones) ganas 50€ con la apuesta en contra del favorito, y pierdes 75€ de la apuesta en contra del segundo, para una pérdida total de 25€.
Si gana cualquier otro caballo (20% de ocasiones), ganas 50€ de cada apuesta para una ganancia total de 100€.
Eso queire decir que a la larga tienes un beneficio fijo. Se pueden presentar dos problemas: en primer lugar no todos los días hay grandes favoritos, ni los segundos favoritos tienen cuotas muy bajas. En segundo lugar, para garantizar que puedes seguir apostando incluso si te llega una mala racha en la que varios segundos ganen sus carreras, necesitas vigilar tu banca. Si sólo dispones de 100 euros, evidentemente no es una buena idea meter 50 a cada caballo, y quizás tengas que limitarte a 10€ euros de apuesta máxima. Recuerda que Betfair no es una casa de apuestas, sino un mercado de valores en el que invertir buscando beneficio a corto o largo plazo. Si tu banco te dijese que en un sólo día te pagarían el 10% de lo que metieses en tu cuenta la abrirías corriendo. Plantéatelo como una inversión, no un juego, y cada mes te harás con un sobresueldo.